La cosa
“N ada,dejá,cosa mía”.Cosa tuya cuando me miras sin decir nada, ponés cara de preocupada y dejas todo por la mitad. Cosa que no tiene nombre, indescifrable. Se inmiscuye detrás de una capa muy fina de indiferencia que, si no te conociera bien, diría que es soberbia —y de la peor, esa que contamina— .En las profundidades de tu cabeza crees que no tengo derecho a saber que te preocupa solo xq es tuyo, pero en ese punto radica el error. Es mío desde el momento en el que decidí formar parte de tu ser. En un sentido abstracto estoy dentro de tu conciencia y quizás en algún descuido pisé por error un pensamiento tóxico: “Disculpe, señor, me vienen empujando desde atrás”. Cosa que aparece de forma fugaz. Destiñe tu realidad tan bien consolidada para prometer un mundo nuevo, de dudosas apariencias oscuras. De tinieblas con gusto a rancio. De treintañeros queriendo revivir una época en la que ya no existen, pero se esfuerzan por querer encajar igual.No quiero juzgar, ya que, algún dí...