Idealizar (Relato)
Hoy saliste a la calle,a pasear esa sonrisa tan particular. Te pusiste ese jean gastado,( que me desconcentraba cuando quería entender la guerra fria) retratando tu onda simple pero que no se reserva nada. Caminaste hasta la parada del colectivo, y sentiste que te habías olvidado algo. Seguiste camino hacia la parada,suspiraste fuerte al ver hacia arriba y contemplar la belleza del atardecer, te cruzaste con una amiga y viste pasar a un familiar. Se te había despintado una uña, y te acordaste cuando se te rompió un esmalte, tu mamá te castigo por una semana. Te acordaste del colegio privado,de los amigos de ese entonces que hoy son apenas conocidos. Subiste al colectivo, el señor de adelante en la fila te dejó pasar (y como no si sos la que pone una nota de color en esas caras cansadas) Te sentaste en el fondo y pusiste la playlist de reggaeton. Es viernes, pero no salis, estas cansada. Querés llegar y que tu viejo te espere con el asado, un clásico para cerrar la semana. Un compañero te habla a wpp y te pide los apuntes ( en realidad es el buitre de la clase y no precisamente el de los fondos, pero a vos te gusta un poco) le respondes y se quedan charlando. Llagas a tu casa, saludas a León que te mueve la cola, tus viejos no te escuchan están en el quincho. Las chicas del club están organizando previa, te vuelven las ganas de salir.Te pones comoda, te servís un jugo de manzana y empezas a hojear (por vez número 15) "Rayuela" de Cortazar. Lees una frase que te gusta, te hace acordar a algo, a un campamento, un verano, un primer amor. La subrayas. Te quedas pensando en eso, y finalmente te consume el sueño en el sillón blanco.
Todo eso lo sabes porque lo viviste, lo que no sabes es que cuando sentiste que te habías olvidado algo, no era una obsesion producida por tu inconsciente; Era que por un momento pensé en vos, te pensé casi como un imposible, de esas cosas que sólo una casualidad de la vida podría concretar. Como me dijeron que idealizar no sirve de nada, suprimí al instante esa idea, para concentrarme en las cosas que pasan, con la intención de no volar tanto y conformarme con lo que la realidad me ofrece.